Escucha la voz del Señor cuando Él habla.
Preste atención a su consejo y siempre estar dispuestos a cambiar sus propias formas para ajustarse a la Suya.
No seas dura cerviz, terco y resistente al Consejo Santo porque los caminos de la carne lleva a espiritual destrucción.
Busque el consejo de Dios y estar dispuestos a obedecerla.
No hay que buscar la sabiduría sólo por el bien de la sabiduría, sino
más bien buscar la sabiduría que usted puede ser capaz de caminar por
las vías que son agradables delante de los ojos de nuestro Señor.
Tratar de complacer Dios en todo lo que haces y lo que agrada a Dios.
Tómese el tiempo para que fuésemos santos y buscas ser santo todo el tiempo.
Camina con Dios y hacer su voluntad y en todo lo que hacen estar dispuesto a caminar con Dios.
Que Dios sea su guía personal y Consejero de todas las decisiones de su vida y buscan para sus respuestas a todos sus problemas.